En 1884 España fijó su hora legal en el huso horario que geográfica y solarmente le corresponde: el meridiano 0 º o meridiano de Greenwich.

Sin embargo, en 1942, en plena II Guerra Mundial, España adoptó el horario centroeuropeo como gesto hacia Alemania. Reino Unido y Portugal también cambiaron su horario. Sin embargo, al acabar la guerra, estos volvieron a su verdadero huso horario, el huso europeo occidental. España no. España está desde 1942, inexplicablemente, en un huso que no le corresponde por su posición geográfica y solar.

Según un informe de la Comisión de Igualdad del Congreso, regresar al horario de Greenwich, u horario GMT (inspirado en el ciclo solar diurno), tendría un efecto favorable en la conciliación familiar, laboral y personal de todas las personas.

Recuperar el horario que nos pertenece, el horario real de España, mejoraría la calidad de nuestras horas de sueño levantándonos y acostándonos a unas horas ajustadas con el sol. La salud de nuestro cuerpo y de nuestra mente agradecería ir de la mano con el horario solar. Madrugaríamos menos y dormiríamos más y mejor, lo cual favorecería especialmente a los trabajadores y a los niños, que son quienes más madrugan y más necesidad tienen de dormir bien.

Este cambio también se aplicaría en las Islas Canarias, ya que se encuentran en otro huso horario diferente, por lo que allí seguiría siendo una hora menos que en la península.

Esta medida, debería ir acompañada de otras en aras de mejorar la conciliación de la vida familiar, laboral y personal, tales como rediseñar los horarios laborales para mejorar la productividad y reducir el absentismo, concienciar y potenciar el ahorro energético o estudiar a fondo la eficiencia de los dos cambios de hora anuales (marzo y octubre).

Por eso, pedimos al Gobierno la corrección de esta situación anómala, devolviendo a España a su horario real, geográfica y solarmente. Es muy sencillo: una ley que acuerde la vuelta de España a su horario, el occidental europeo, simplemente indicando que en el mes de marzo de 2016 no adelantemos los relojes. Por la salud de todos.