Mejor entre rejas que en la calle con la crisis. Ésta es la actitud que están empezando a tener algunos reclusos de las cárceles de la provincia y que están renunciando a la posibilidad de salir en libertad con un tercer grado penitenciario ante la imposibilidad de subsistir fuera por la dificultad de encontrar trabajo. La situación ha sido denunciada por la Agrupación de los Cuerpos de la Administración de Instituciones Penitenciarias (ACAIP) en su último informe sobre la situación en las cárceles de la Comunidad Valenciana y alerta de que las cárceles no están preparadas para asumir a esta población inesperada, ya que los presos en este régimen de semilibertad están en un área especial donde se supone que sólo van a dormir.
Algunos letrados admiten que incluso desde hace dos años sus propios clientes están diciéndoles que no les pidan fianza, porque en la calle no tienen nada. La masificación en las cárceles de la provincia supera el 150%, aunque la población penitenciaria ha descendido y en Fontcalent se ha dejado atrás la cifra del millar de internos, con un total de 871 presos, según las cifras recogidas en el citado informe.
Desde el sindicato Acaip se señaló que los presos que han obtenido el tercer grado suelen alojarse en un módulo especial, que en el caso de Fontcalent es un añadido más a la infraestructura de la prisión y que está diseñado para que los internos regresen allí para dormir por la noche, cuando regresan de trabajar. «Con el panorama de crisis que existe, algunos optan por no salir y se quedan allí durante todo el día. Esas instalaciones no están previstas para que estos internos pasen allí todo el tiempo y ni siquiera hay un número fijo de funcionarios asignados», alertaron desde el sindicato.
Fontcalent cuenta con un total de 166 reclusos en situación de tercer grado, aunque desde el sindicato se indicó que no existen datos de cuántos de ellos optan por quedarse a pasar el día en la cárcel. Aunque en Villena hay contabilizados diez internos en tercer grado, lo habitual es que éstos sean trasladados a Fontcalent cuando logran este estatus penitenciario. Las mismas fuentes matizaron que tener un trabajo es uno de los requisitos que pueden ayudar a obtener el tercer grado, pero no es un aspecto determinante. El centro prevé la posibilidad de que estos internos salgan de la cárcel para ir a buscar trabajo. «Pero si no encuentran nada, no hay motivo para que vuelvan a salir y se quedan recluidos ellos mismos», explicaron las mismas fuentes.
Abogados consultados por este diario señalaron que se han llegado a encontrar con casos en los que el reo ha renunciado a que le pidan una fianza para que salga en libertad antes de tiempo. Con seis meses en prisión y con cargas familiares, el reo tiene derecho al subsidio de parto cuando salga en libertad.
El presidente de la Audiencia de Alicante, Vicente Magro, aseguró que no disponen de datos que avalen los hechos denunciados por el sindicato, aunque matizó que desde hace unos meses se ha detectado que la Audiencia tiene que resolver menos peticiones de libertad que reclaman las defensas de los reclusos. Magro puntualizó que, de darse estas situaciones, se trataría de presos a los que se ha impuesto una pena de prisión baja, «ya que en las condenas largas, la tendencia siempre va a ser recurrir para recuperar la libertad cuanto antes». En todo caso, el magistrado señaló que si el reo se niega a marcharse, «es una decisión personal suya y tampoco se le puede obligar».
Según el informe de Acaip, las dos prisiones de la provincia (Fontcalent, Villena y el Psiquiátrico Penitenciario) suman un total de 2.332 presos. A pesar de que la población penitenciaria se ha reducido en un cuatro por ciento, la tasa de masificación supera el 150 por cientotasa masificación 150 por ciento. Fontcalent cuenta con un total de 871 internos que se reparten en 555 celdas; mientras que en Villena son 1.136 reos en 723 celdas. La tasa de masificación es del 156,94% en el caso de Fontcalent; y de un 157,12% en Villena. El Psiquiátrico Penitenciario, uno de los dos únicos centros para enfermos mentales condenados por delitos en toda España, está por debajo de su capacidad, con un total de 325 reos para 348 celdas y una tasa de ocupación del 93,39%.
Las prisiones con mayor masificación de la Comunidad son las de Valencia y las que menos las de Castellón.
