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La Fiscalía solicitó al Órgano Judicial la detención preventiva del empresario y político Samuel Doria Medina en la cárcel de San Pedro de la ciudad de La Paz, debido a supuestos delitos cometidos en el caso FOCAS.
Según documentación a la que tuvo acceso ERBOL, la Fiscalía pidió que se encierre al líder opositor bajo el argumento de que presuntamente existe riesgo de que fugue u obstaculice la investigación.
Para sustentar el riesgo de fuga, el Ministerio Público sostuvo que Doria Medina puede salir del país fácilmente, puesto que sólo en este año viajó al exterior en al menos 10 ocasiones. Asimismo, señaló que el acusado no tiene una fuente laboral o negocio definido.
En cuanto al riesgo de obstaculización, según la Fiscalía, Samuel tiene contactos con la representación diplomática de Estados Unidos, lo que podría perjudicar a la averiguación de la verdad.
La magistrada del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ), Maritza Suntura, confirmó que el Ministerio Público pidió la detención del líder opositor y que esa situación se analizará en una audiencia del próximo 3 de noviembre.
La Sala Penal del TSJ definirá el futuro de Samuel el jueves de la próxima semana, según nota de prensa de esta entidad.
¿Por qué está imputado?
De acuerdo a los antecedentes de este caso, Bolivia recibió financiamiento de Estados Unidos para el proyecto FOCAS (Formación de Capital en Áreas Secundarias), pero Doria Medina, en su calidad de Ministro de Planeamiento en 1992, dispuso que ese dinero pase a la entidad privada llamada Fundación para la Producción (Funda-Pro).
Según la denuncia impulsada por la Asamblea Legislativa, el opositor suscribió el 8 de octubre de 1992 un contrato de préstamo de 21 millones de dólares de dinero de FOCAS a favor de Funda-Pro, con un interés menor al que pagaba el Estado a sus acreedores.
Por tal motivo, el líder de Unidad Nacional (UN) fue imputado por la presunta comisión de los delitos de Incumplimiento de Deberes, Contratos Lesivos al Estado y Conducta Antieconómica.
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