Las callecitas de La Cumbre, con pendientes pronunciadas y añosas casas con arquitectura que remite a una villa europea, se transformaron por unas horas en una pintura de la Edad Media. Unos 100 templarios llegados desde distintos puntos de Latinoamérica y Europa desfilaron por esas calles ante la mirada de sorpresa de los turistas que se toparon con un evento singular.
“Estamos viviendo un hecho histórico”, se animó a decir José Luis Villalba, teniente de la Fuerza Aérea de Chile y a su vez miembro de la Orden del Temple.
Vestidos con sus ropajes blancos, con estandartes marcados por una cruz roja, los caballeros y damas desfilaron para homenajear a la patrona de la orden, Santa María Magdalena, en el día en que el santoral marca su festividad.
César Imbelloni es autor de dos libros sobre los caballeros templarios y tiene su vida partida en dos entre La Cumbre y Barcelona. Es cordobés y se radicó en España, donde empezó a cultivar su pasión por la historia de los caballeros que libraron batallas en las Cruzadas. Es, a su vez, el organizador de este evento que contó con el apoyo de la Municipalidad de La Cumbre.
Cerca de la gente
Imbelloni afirma que los caballeros templarios están ligados a la presencia jesuítica en nuestro país. “Junto con la presentación de mi libro Templarios hijos del sol , estamos filmando un cortometraje que ya tiene imágenes de Europa y ahora registramos de Argentina”, dice.
La Orden del Temple tuvo un fuerte poderío tras su surgimiento hace a 800 años, y su rol más conocido en la historia está ligado a las Cruzadas.
La idea de este primer “desembarco” en La Cumbre es generar un evento multicultural, histórico y turístico. “Muchas organizaciones en el mundo recrean esta historia y muchas de ellas están en La Cumbre con delegaciones de Italia, Francia, Portugal, España, y de Latinoamérica”, cuenta Imbelloni.
Emoción en la marcha
Los flashes de los celulares apuntaron con insistencia a esos hombres y mujeres de túnicas blancas que desfilaron a paso militar por la cuidad.
Al teniente chileno Villalba le tocó el rol de comandar esa marcha.
“Hace más de 700 años que la orden no ha salido a la vista, y eso hace que este día sea histórico en esta parte del mundo”, dice, y agrega: “Tiene otro color especial que se haga en un lugar emblemático como este, en Argentina”.
El coronel Rafael Montesinos es aviador de la Fuerza Aérea venezolana y prior de la orden.
“Hoy, nuestro rol es religioso, cumplir con nuestra patrona, y otro de los pasos es hacernos conocer en Latinoamérica”, señala y apunta que, a diferencia de los masones, ellos son “discretos, no secretos”.
Montesinos advierte que hay pruebas de que los templarios estuvieron en América, y Argentina es una de las bases donde fueron más fuertes.
“Los orígenes de todas las capitales que llevan el nombre de Santiago, en honor a Santiago de Compostela, tienen algo que ver con los templarios”, argumenta.
Celebración
El cierre fue una misa en honor a Santa María Magdalena y una charla sobre la orden.