Miguel Cazorla, de Ciudadanos, es uno de los denunciantes del presunto fraude electoral cometido por el equipo de Rodríguez Comendador (PP)
TELEPRENSA.- La investigación abierta por la Fiscalía de Almería por el presunto fraude electoral cometido por el PP y que ha sido denunciado por el PSOE y Ciudadanos en la capital, además de otras denuncias ante las distintas juntas electorales, aleja las posibilidades de pactos entre PP y la formación naranja. El voto por correo ha crecido de manera sorpresiva en Almería más del 50% respecto a los últimos comicios y ahora toca investigar si las personas que han sido beneficiadas con nuevas licencias de puestos ambulantes y otras presuntas dádivas dadas por el PP según los denunciantes, se corresponden con ciudadanos que según el censo votaron por correo, tanto ellos como su entorno familiar.
Este hecho pone en tela de juicio las posibilidades de Luis Rogelio Rodríguez Comendador para conseguir el apoyo de Miguel Cazorla, cabeza de lista de Ciudadanos, ya que su electorado no entendería que con una mano firmase la denuncia contra un presunto delito electoral y con la otra votase a Comendador como alcalde.
El PP tendrá que mover ficha ante las acusaciones y la primera podría estar en el entorno de conseguir que la fiscalía se pronunciase antes de la fecha límite que sería la del sábado 13 de junio. De producirse esta aceleración en el proceso de investigación de la fiscalía obligaría al órgano judicial a explicar el proceso seguido a tenor de los tiempos empleados para dirimir casos similares en el pasado, como ocurrió antaño en Carboneras.
Otra opción que tiene ante sí el Partido Popular es que el concejal que ha sido señalado en las denuncias como presunta mano ejecutora del fraude denunciado, Carlos Sánchez, presente su dimisión como sacrificio para un bien mayor como es conseguir la alcaldía, asumiendo la culpabilidad de lo ocurrido y centrando así el caso y la posible responsabilidad penal en su persona de manera que no dañase la imagen de toda la lista.
La denuncia
El PSOE denunció “que el pasado día 16 de mayo en el barrio de Pescadería, en la calle Botalón y Bitácora y adyacentes, varios vecinos nos dijeron que “los votos de aquellas calles ya estaban comprados por el PP a cambio de puestos de venta en el mercado ambulante”, que la fórmula realizada era darles a los muñidores electorales del PP entre 10 y 20 DNI por cada puesto de venta ambulante”. Igualmente personas que trabajan en mercados ambulantes les han contado que “desde el Ayuntamiento, presuntamente a cambio de votos, se han adjudicado provisionalmente nuevos puestos de venta en distintos mercadillos durante el presente mes de mayo por parte del responsable del Área, el concejal Carlos Sánchez, sin pasar, al parecer, por el procedimiento establecido, sin pagar, al parecer, las tasas estipuladas, etc”. En concreto, enumeran hasta más de una decena de puestos.
El Grupo Municipal Socialista ya ha pedido al Alcalde de Almería una copia del Expediente para poder comprobar esta información, “para ver si es más extensa la relación de autorizaciones provisionales dadas por el concejal referido en estos momentos electorales y para estudiar las garantías de estas personas y su seguridad jurídica así como verificar el proceso legítimo de otorgamiento de las autorizaciones a dichas personas”.
En el escrito que han entregado en el juzgado, apuntan a que en la investigación la Fiscalía deberá requerir a la Delegación de Estadística de Almería comprobar si las personas adjudicatarias de estos nuevos puestos han emitido el voto por correo así como sus familiares. De la misma manera, entienden que será preciso preguntar a la Policía Municipal si estos señores cumplen con los requisitos legales y tienen los papeles en regla para ubicarse en dichos puestos de venta ambulante.
Pero éste no es el único caso de compra de voto detectado por los socialistas. Así, aseguran que un grupo de militantes del PSOE haciendo campaña electoral en el Barrio de Torrecárdenas se toparon con un señor que les manifestó que “él ya había votado”, se le dijo que cómo era posible si aún no se había producido el día de la votación, y aseguró “ que tanto él como su mujer, sus cuñados y varios de su amigos habían firmado los papeles a su suegro que era el encargado de hacer el voto” y que a cambio “le iban a dar un local en el Puche para que montara una asociación”
También han tenido conocimiento de que están llegando hasta 53 solicitudes de voto por correo a un mismo domicilio de El Puche, en el cual no vive nadie, y que posteriormente alguien recoge a las personas que van dirigidos los sobres y los lleva en una furgoneta a Correos a cambio de 20 euros.
Otras personas de este barrio también les han dicho que ya han votado “que les habían pedido los DNI y que no era necesario que fueran el domingo al colegio electoral a depositar el voto”
Además de en Pescadería y El Puche, en El Alquián también han conocido que “a trabajadores de una empresa concesionaria del Ayuntamiento de Almería, se les ha requerido el DNI de sus mujeres e hijos para tramitarles la solicitud del voto por correo”.
“El aumento del voto por correo en estas elecciones ha experimentado según nuestras noticias una subida muy significativa con respecto a otras elecciones anteriores, lo que viene a incidir presuntamente en un supuesto fraude electoral y compra de voto bastante generalizado por parte del Partido Popular de Almería”, concluye el escrito del PSOE.
