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¿El futuro de los videojuegos está en los móviles?

Uno de los creadores del exitoso juego Candy Crush Saga asegura que esta industria se apoderará de los celulares.

19 de noviembre de 2014

Actualmente, la industria de los juegos de video vive una época de bonanza por la variedad de usuarios que tiene (niños, jóvenes y adultos contemporáneos). Al año produce ganancias por más de 70.000 millones de euros, de los cuales el 20 por ciento viene de los juegos para dispositivos móviles como smartphones y tabletas. Varios expertos aseguran que ese porcentaje de mercado aumentará en los próximos años. ¿Por qué?

El cocreador del juego Candy Crush Saga, el sueco Sebastian Knutsson, explica que la evolución de esta poderosa industria debe apuntar a los equipos móviles “porque los juegos cuestan poco y se pueden adquirir y utilizar de inmediato”.

Además, agrega Knutsson, la posibilidad de disfrutar el juego en cualquier lugar y momento es un diferencial significativo frente a las consolas y los computadores que sólo se pueden utilizar en espacios fijos sin posibilidad de movilizarse.

Polémica latente

La discusión entre los usuarios y las propias marcas se centra en la calidad de la experiencia que tiene el jugador en las versiones para consola y la que puede tener en un dispositivo móvil.  “En una consola o incluso en el computador el precio es mucho más caro, por lo que el público es más elitista", explica Knutsson.

Los defensores de las consolas aseguran que no se puede comparar la experiencia de casi inmiscuirse físicamente en el juego con algo tan simple como deslizar algunos iconos por la pantalla táctil. “Es cuestión de experiencia. Los videojuegos no están para ser móviles, están para ser disputados al máximo”, comentó a Semana.com el ‘gamer’ (asiduo usuario de juegos de consola), Jean Orjuela.

El quid del asunto se concentra, entonces, en la masificación de los videojuegos. Mientras que un juego como Candy Crush tiene aproximadamente 50 millones de usuarios, un juego de consola no pasa de los 200 mil ‘players’ –cifra que es bastante aceptable para la industria-.

Lo cierto es que para los fabricantes de consolas y videojuegos, los juegos para celulares y tabletas todavía no son una amenaza. Las ventas de la Play Station PS4 de Sony alcanzaron los diez millones de unidades vendidas en todo el mundo, mientras que la consola Xbox One estaría rondando los cinco millones.

La pregunta es: ¿cuál será la tendencia del mercado a mediano plazo? Los consumidores tendrán la última palabra.