Por: Arturo Lozano.

El cine de terror desde sus primeros años ha servido como una máscara, para poder expresar problemas elementales que se han tenido en las diferentes etapas sociales, un claro ejemplo de esto ha sido el expresionismo alemán que a través de sus conceptos artísticos y estilo visual distorsionado, usaban metáforas de terror para hablar sobre la pobreza vivida en Alemania después de la primera Guerra Mundial.

Un claro ejemplo del uso político que se le pueda dar al cine de terror es la época de los 80´s, donde hubo un furor con las llamadas slasher movies y donde surgieron personajes icónicos como Jason Vorhees o Freddy Krueger, ellos se dedicaban a matar adolescentes en su plenitud sexual, la cual coincidía con la ideología conservadora del gobierno de esa época.

En la actualidad en el cine mexicano de terror se ha tomado como esquema las películas de esa época  porque los cineastas de estas generaciones crecieron viendo éstas. Diversos directores en sus conferencias de prensa en el Festival de Cine de terror Feratum, como el caso de Jonathan Sarmiento, director de la película mexicana Insignis mencionaban en que más allá de la trama sobrenatural, lo que realmente quería llegar a transmitir es que para superar un problema es necesario el trabajar en equipo y apoyarse mutuamente.

También una película que intenta reflejar los problemas sociales que se han estado viviendo  en el país es la película, Volverá el polvo a la tierra del director Alejandro Soltero en la cual un hombre de la tercera que ha perdido a su esposa mata mujeres para que en sus cuerpos pueda regresar el alma de su difunta amada, lo que se intenta mostrar es la gravedad y el gran aumento de casos de feminicidios que hay en México y la indiferencia que hay por parte de las autoridades por solucionar estos problemas.

Y es que ahora se cuenta con una mayor libertad de poder mostrar las historias que uno se siente comprometido a contar, como mencionó el director Carlos Carrera durante su Masterclass impartida en que ahora ya podemos realizar una película con nuestro teléfono celular, ya no hay impedimentos en tener que buscar algún estudio en Los Ángeles o mínimo tener que estar en la Ciudad de México, lo importante es tener algo que expresar que sea de trascendencia.

Y es que gran parte del éxito y revitalización que se ha tenido del cine de terror en México, ha sido gracias a las redes sociales que permiten poder tener una amplia base de fans y dar a conocer películas que de otra manera no se podría tener acceso, es como el director Finlandés Jesse Haja comentó: ‘’Cuando llegué al aeropuerto de la ciudad de México me sorprendió el ver que había gente recibiéndonos que eran fanáticos de la película Rendel, no pensé que la conocieran’’.

Y es que aunque muchos de los directores a la hora de contar sobre el proceso de creación de las películas muchos coincidieron en el problema de encontrar un productor que creyera en ellos debido a que el cine de terror mexicano no convence tanto para comercializar como las comedias románticas que hoy en día son un éxito entre las audiencias mexicanas, debido a que es una forma segura de recuperar las inversiones, cosa que con el otro género aún no existe.

Y es irónico debido a que el cine de terror suele ser uno de los favoritos por los mexicanos, en los que producciones internacionales como Anabelle o El Conjuro suelen cumplir las expectativas de recaudación de taquilla en los cines, pero cuando se trata de producciones nacionales se sigue manteniendo un estigma de verse como una película ‘’mexicana’’ más que llamarla por su género perteneciente.

Sin embargo nada de esto ha detenido a los realizadores, ya que año con año cada vez se suman más producciones de este tipo y es que desde inicios de esta última década, se han estado estrenando más películas de terror en la cartelera de los principales cines, asimismo cada vez son más los Festivales de Cine dedicados al terror y la fantasía como lo son el Festival Macabro, el Festival Mórbido, el Festival Feratum, por mencionar algunos.

Al final el cine de terror parece haber tomado su segundo aire en estos años, igualmente son más los cineastas que cuentan con diversas herramientas para poder llevar a cabo sus ideas, sin tener que estar dependientes de los grandes estudios y productores que antes que cualquier idea creativa, están atenidos a lo que indican los números y cifras monetarias.