El caso del policía local de Sevilla, muerto en un atropello, será juzgado como delito y no como falta

La muerte por accidente de un policía local arrollado por un turismo en un cruce en 2013 s erá juzgada finalmente como un delito y no como falta . La familia del agente caído Sergio Rodríguez-Prat ha ganado esta primera batalla a través de un recurso elevado a la Audiencia Provincial que ha paralizado el procedimiento que se iba a solventar el próximo 1 de diciembre con la celebración de una vista en el juzgado de Instrucción nº 16.

El agente estaba de servicio el 16 de diciembre de 2013 cuando fue embestido por un coche conducido por una mujer que se saltó un semáforo en rojo en el centro de Sevilla. Sergio, que tenía 27 años y apenas llevaba doce meses en el Cuerpo, estaba destinado en la unidad motorista.

La conductora que causó el siniestro mortal se confundió y reanudó la marcha siguiendo las indicaciones de un semáforo que no le correspondía . La Fiscalía consideró que esta conducta podría ser constitutiva de una imprudencia leve, calificada como falta, ya que la denunciada dio negativo en la prueba de alcoholemia y la infracción fue fruto de un despiste con consecuencias trágicas.

Sin embargo, el Ministerio Fiscal sí respaldó en parte el recurso presentado por la familia del agente fallecido, reconociendo su derecho, como parte personada en un procedimiento, a plantear una acusación por delito y defenderla en un juicio .

Éste ha sido el argumento esgrimido por la Audiencia para ordenar al juzgado instructor que reinicie la causa para que sea juzgado por un delito de imprudencia grave y no como una falta, según han confirmado fuentes del caso. Una decisión reclamada por la familia de la víctima, que no se conformaba con una pena de multa.

El pasado mes de octubre un grupo de familiares y amigos de la víctima acudió a los juzgados del Prado donde estaba previsto que se celebrara el juicio de faltas por el accidente que sesgó la vida de Sergio. Vestían camisetas con la fotografía del funcionario y reclamaron Justicia en los pasillos del edificio judicial.

El juez aceptó la petición de suspensión «in extremis» planteada por la acusación particular. El abogado de la familia solicitó un aplazamiento hasta que la Audiencia resolviera. Una demanda que fue respondida «siguiendo un criterio estricto de sensibilidad» dijo en sala el magistrado.